lunes, 2 de marzo de 2015

El principio de natura

Una traviesa niña jugaba en los límites de la selva, ella sabía que no debía adentrarse a las profundidades, pero no había nada que más deseara que jugar entre lo prohibido.  
Un día se alejó lo bastante de la aldea, y cuando creyó haber perdido de vista a su gente, se adentro en las honduras de la selva.    
Penetró tanto la jungla, que ya no supo como volver.
La maleza la consumió, tanto que se convirtió en parte de ella.
A medida que fue creciendo, su cuerpo se adaptó al entorno, su piel se volvió tierra, y su cabello maleza. Le crecían flores y hojas como coronas.
Fue conociendo todos los animales, y se encargaba que todo estuviera en su lugar.  
Ayudaba a las flores a florecer cuando la primavera arribaba sobre ellos, despertaba a los animales que invernaban cuando el invierno llegaba a su culminación, les daba aliento a los pichones primerizos en sus vuelos. Todas aquellas tareas realizaba, y las realizaba con verdadero amor.      
Algunos días le tocaba realizar tareas más difíciles, como aquella noche, cuando los bosques se habían incendiado, unos cazadores con antorcha en mano, habían prendido fuego los arbustos para espantar a los animales de sus nidos.
Ella no dudo en actuar, rompió la presa de los castores, y con aquella agua bañó las llamas que consumían la jungla. Luego, convocó a las bestias salvajes, panteras negras como el carbón, lobos de parduzcas melenas, ahuyentaron en persecución a los malvivientes cazadores, que cazan no por necesidad o hambre, sino por diversión o deporte.    
O como aquel día, que un agudo llanto la despertó de su siesta. Buscó el origen de los gemidos, al principio pensó que sería algún cachorro de pantera perdido, pero se equivocó, era una niña humana.  
Era una pequeña niña de piel oscura, cabellos rizados y ojos grandes. La nena lloraba abrazando sus rodillas, las lágrimas se escurrían por su rostro sin fin.
Se acercó a la niña, la pequeña al principio se sorprendió al verla, nunca había visto tal ser extraño, dejó de llorar para verla extrañada:
_ ¿Por qué lloras niña?_
_ Me he perdido y no se cómo volver a mi aldea_
_ Yo conozco una aldea, puedo llevarte a ella_
La mujer naturaleza, tomó a la niña de la mano y la acompañó hasta el final de la jungla.
Cuando vió las tiendas de la aldea, su memoria trajo imágenes de su niñez. Ella había escapado de aquella aldea, y siendo tan pequeña no supo volver, la jungla la había adoptado desde entonces y ella se había convertido en su guardiana.
Añoró volver a su antigua vida, pero ya era tarde, no podía regresar, ella era parte de la selva y no podía abandonarla.
La niña al ver la aldea pegó una feliz carcajada y corrió al encuentro con sus padres, mientras corría volteó un par de veces para estirar su mano y saludar a la mujer que la había rescatado.  

Entonces comprendió por que no podía volver la naturaleza, porque su tarea era rescatar a todos los niños que se perdían como ella, proteger a los indefensos animales de los cazadores furtivos, y salvar a la vegetación de los incendios, y un montón de tareas más que solo ella podía realizar.     

22 comentarios:

  1. Una historia preciosa. Una niña que se convirtió en guardiana de la naturaleza ya sea porque fue el destino o porque recibió un castigo, aunque si vamos al caso tampoco es un castigo terrible, sin embargo el trabajo es oneroso. Más allá de eso, los resultados son satisfactorios. Ver la naturaleza creer sin que la mano destructiva del hombre la toca.

    Ahora ella es un espíritu guardián, como lo eran los alfar, es decir los elfos originales de las sagas nórdicas. Digo así para separarlos de la concepción actual de los elfos, impuesta por Tolkien y su universo (no considerar esto como si fuese impuesto de mala manera, sólo que todo lo que se escribió de los elfos tras la publicación de los textos de Tolkien se nutren de éstos).

    Un lindo cuento. Hasta la próxima. ¡Saludos!

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    1. Tolkien es mi autor favorito, jeje, es cierto que con su obra cambio la cosmovisión de tales criaturas, en la cultura nordica, los elfos eran pequeños seres alados, muy similares a las hadas, y muy molestos y torpes, al igual que los duendes, se los retrataba como enormes gatos parlanchines, y luego eso cambio con la tierra media.

      Es cierto tambien la mayoría de los autores contemporaneos o posteriores a J. R. R. Tolkien siguieron su ejemplo, que debo decir, que no me desagrada ni un poquito. Es más ahora ando escribiendo una novela donde salen elfos y todo eso, obviamente no le llego ni a los talones a Tolkien pero me es de inspiración. Je je

      Un saludo... !!!

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    2. A mi tampoco me molesta. Solo que muchos no saben que los elfos de las sagas nordicas eran mas bien espiritus guardianes, capaces de usar magia. En algunas fuentes los describen mas como hechiceros.

      Me encantaria leer esa novela que estas escribiendo. Es cierto que no le llegaras a los talones de Tolkien, nadie podra de todos modos. Pero eso no es objetivo. Seguro sera una hermosa y grandiosa novela ;-)

      Que tengas una tarde preciosa. Saludos!

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    3. La verdad tengo muchas dudas con respecto a esta novela que estoy escribiendo. No me convence por completo. Y la verdad se me esta haciendo muy complicado escribirla. Si no es molestia me gustaría mandarte el doc x privado y recibir tu parecer al respecto. Es que se me hace que es media aburrida jajajj

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    4. ¡Claro! Como quieras, no es molestia. Si te puedo ayudar en algo, estaría encantado. No sé si pasarte el e-mail aquí o por hangouts. Tú dirás. Nos vemos.

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  2. Es una hermosa historia. Las imágenes que nos imprimes en la mente son agradables, los paisajes y el contexto. Saludos!

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    1. Gracias por leer mi historia y comentarla. Me alegro que le haya gustado. Un saludo.

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  3. Querida Cynthia:

    Esta es una bella y bucólica historia, muy bien formulada en su concepción ambiental, pero volvo a apuntarlhe la necesidad de algunos ajustes en la puntuación para mejor fluidez.

    Si me permites, le sugiero que siempre intentes generar tanto como posible períodos cortos, con el fin de evitar que se agote la respiración del lector o que se nuble el hilo de su razonamiento.

    Esa característica también proporciona obviamente mejor calidad estilística al texto, así como más fácil entendimiento, el que representa sin duda factor de lealtad del lector.

    Otro punto: la secuencia lógica del texto - coherencia - fue afectada en el último párrafo, así como, si no lo he mal entendido, el significado de la expresión inicial de ese tramo final.

    El punto es que, como el párrafo anterior se refiere a la niña rescatada, para mayor claridad, el siguiente párrafo debería reanudar la referencia explícita a la protagonista.

    En la expresión "no podía volver la naturaleza", repito, si no la tengo entendido mal, parece contradictoria, dado que el personaje no podría, de hecho, "dejar’ de volver a la naturaleza”.

    Si estoy equivocado, me explique, por favor, el significado exacto del término; puede ser que "volver" tenga una acepción que se me escapa, significando "dar la espalda a ".

    En este caso, sin embargo, la expresión parece incompleta, por lo que usted podría ayudarme a entender mejor ese aspecto del término en el ámbito del español.

    Me encanta enormemente el español desde la niñez y en los últimos años me he dedicado a la lectura de libros en esa hermosa lengua, por lo que muy me interesa conocerla mejor.

    Gracias.

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    1. Buenas tardes, muchas gracias por comentar y leer.

      Yo no tengo muy afinada la redacción, pero cuando escribi "Entonces comprendió por que no podía volver la naturaleza" me refiero en este caso a "la naturaleza" como sujeto protagonista y no como un espacio, ya que la naturaleza no podía volver a la aldea donde vivía antes.

      Pero soy una aficionada en la escritura y puede ser que de a confusión a veces mi redacción.

      Un saludo.

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    2. Entonces el problema es otro. Si se la toma como protagonista, ¿la Naturaleza no debería figurar con inicial mayúscula, incluso para mejor caracterización?

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    3. Solo los sustantivos propios llevan mayúscula, en el caso de "la naturaleza" que es un sustantivo común no, es similar en el caso de "la mujer" y "la niña", por ejemplo.

      La confusión se debe dar en la alteración de la estructura sintáctica, ya que de escribir "la naturaleza no podía volver", he escrito "no podía volver la naturaleza" ambos son correctos, pero sin embargo aquel juego de palabras puede dar lugar a malos entendidos.

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    5. Querida:

      Aunque la norma reserve las iniciais mayúsculas a los nombres propios, en casos como ese, tanto para evitar ambigüedad cuanto para mejor caracterización de la personaje, el autor puede tomar la libertad de utilizar mayúscula en tales expresiones, sin perjuicio del recurso de la inversión frasal.

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    6. No estaba enterada de esa posibilidad, es bueno saberlo para el futuro. No dudare en ponerlo en práctica.

      Gracias por la crítica constructiva y los consejos.

      Un saludo.

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    7. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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    8. Querida Cynthia:

      No olvides que cada escrito literario es una pieza en permanente proceso de construcción, a ser revista y reformulada tantas veces como sea necesario, en busca, no de la perfección, porque es imposible, pero de se hacer lo mejor que se pueda en vista del mejor efecto estilístico o de la más refinada emoción estética.

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    9. Estoy de acuerdo con usted. La correcta ortografía, redacción y orden de la estructura sintáctica dan al texto un toque estilístico.

      Debo decir que el otro día tuve una discusión sobre este tema con una mujer, ella decía que no importaba que estuviera mal escrito, un buen escritor no se mide por su buena gramática y redacción.

      Yo le intentaba explicar que muchas veces el hilo del argumento del texto puede ser interrumpido por alguno de estos errores, incluso puede desviar la atención del lector del verdadero tema de la obra, en otras palabras te descoloca y te hace perderte o romper el vinculo que se había logrado establecer con la lectura, sobre todo con los errores ortográficos.

      Yo acepto que tengo errores en mi redacción y ortografía, e intento mejorarlos, además me gusta recibir críticas para mejorar como escritora. Según esta mujer no era necesario que el escritor mejore sus errores.

      Pero la mujer no entró en razón, así que terminamos la discusión.

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  4. Precioso relato, con muchas hermosas imágenes. Respecto a lo que comentan de los elfos. El autor de la saga de Geralt recupera a los pícaros y traviesos elfos de la literatura nórdica y Shakespeare, pero es cierto que apartar del imaginario a los elfos que nos dio a conocer Tolkien es imposible.

    Muy lindo blog. Un saludo.

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    1. Gracias por visitar mi blog y por comentar mi publicación.

      Es cierto que muy pocos autores contemporaneos retoman el bestiario nordico para sus novelas. Cornelia Funke en su obra "el jinete de dragón" respeta dichas características nordicas, pero cuando lei la obra no fue lo que esperaba. Me resulto mu tediosa en algunos momentos.

      Pero he buscado información con respecto a la saga que mencionas, "Geralt" y me parece muy interesante, cuando termine de leer la novela que estoy leyendo ahora esa sera la siguiente.

      Un Saludo.

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    2. No conocía esa del jinete. Los dos primeros libros de Geralt son cuentos más o menos hilados y después arranca una historia que abarca unos cuantos libros. La prosa es soberbia.

      Salu2.

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  5. La desobediencia de la protagonista fue recompensada, porque se convirtió en una protectora de la naturaleza, alcanzando una armonía reservada a unos pocos.
    Y la resistencia a los cazadores fue otro acto de desobediencia, que a veces es una virtud.

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    1. No me había percatado de que su desobediencia puede ser tomada como una virtud. Un pensamiento muy sabio.

      Muchas gracias por tu comentario. Me ha hecho reflexionar.

      Un saludo.

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